He aquí la última novela de Ramón
Cerdá: "El príncipe de las moscas", la cual cayó hace
unos meses en nuestras manos, procedente de un pueblo, cercano a
Valencia, al que no le son ajenas sus dotes de creador (¿lo
adivinan?). La trama, en sí, no difiere mucho de sus anteriores, con
sus flashbacks continuos del pasado al presente, que siguen fielmente
la estética cinéfila que ronda por la mente del autor, con suaves
visos a Dan Brown y a Reverte (en cuanto a su adaptación
cinematográfica de "El Club Dumas": "La novena
puerta").
Pero, anclado ya este sínodo
literario, cabe entrañar en ésta, una nueva fórmula que nos
llevará a una nueva literatura en Cerdá, quizá más madura, y en
la que se puede apreciar una mejoría en el tratamiento sintáctico y
formal, lo que arguye un enrequecimiento del argumento central
(crecido por el exhaustivo análisis y documentalismo del autor por
la temática usada, al tiempo que una mayor estructuralización de
los contenidos para con la linealidad de los capítulos).
[...]Repitió el proceso con esa parte
de la mano, la que utilizan los karatecas en sus ataques, y volvió a
marcar la imagen tintada en la ficha. Luego repitió todo el proceso
con la otra mano. Al terminar me dieron un trapo mojado con gasolina
para limpiármelas y me lavé sin jabón en el pequeño lavabo que
había visto al entrar en la sala de reseñas.
Después empezó con la segunda parte
del proceso, que fue sentarme en la silla para hacerme las fotos de
cara y de perfil. La silla se movñia espasmódicamente cada vez que
apretaban un pedal y se giraba para cada tipo de foto con sonidos
metálicos secos y bruscos. Ahora ya entiendo por qué en las fichas
policiales todo tienen -quizás debería decir tenemos porque ahora
ya formo parte del club- cara de delincuentes, y es que después de
lo que le hacen pasar a uno, resulta increíble que lo despierten de
madrugada para seguir con las humillaciones. [...]
("El príncipe de las moscas";
pág. 239)
Solo existe un hecho, por lo que parece
ya irremediable en el autor, y que éste ha querido ir eludiendo
intencionadamente en sus novelas: la jerga erótica que tanto lo
habían caracterizado hasta el momento (¿un error traumático al que
será capaz de sobreponerse? Solo el tiempo lo dirá).
Título: "El príncipe de las
moscas"
Editorial Club Universitario (ECU),
2011
Autor: Ramón Cerdá Sanjuán
ISBN: 978-84-9948-453-2
466 págs.
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