Las fotografías que les presentamos a continuación fueron tomadas, hace un par de días tan sólo, por nuestro colaborador en este blog: el escritor Ángel Brichs. ¿Quién no pudiera creer, tras ver estas imágenes, que la misma palabra “arte” no va más allá de esa abstracción lógica que el ser humano le ha asignado desde tiempos remotos? Para resolver este dilema, hemos creído justo y apropiado de ilustrarles con un fragmento del ensayo “El Neomodernismo literario” (Ed. Cultiva, 2008) en el que su autor, el mismo Brichs, esbozaba algunas palabras que pueden deshacernos el misterio:
[En los años “70” apareció un movimiento artístico
que promovía una visión externa de hacer arte, en la
que el medio ambiente y la naturaleza en general eran
sus verdaderos protagonistas. El Neomodernismo
Literario ejerce presión en la coexistencia del pensamiento
y el arte al igual que Gerry Schum y sus coetáneos
de esa tendencia llamada “Land Art”, que creían
que el arte estaba en todas las cosas y era el ser humano
bajo su capacitación, quien le da forma en su esencialismo
natural.
Es en la divergencia, en la controversia, en las diferentes
formas de pensar, en la capacitación sentimental y personal
de cada individuo; en la crítica de cada uno y de todos
nosotros por todo lo que decimos, hacemos y escribimos
donde está la riqueza intelectual de lo que somos y seremos.
Es esa forma de ser subjetivo, la disparidad de ideas,
el individualismo racional de cada individuo que lo hace
diferente del de al lado o el de delante; en ese formalismo
y estética argumental donde radica la gnosis interna que
representa el cauce vital del pensamiento del
Neomodernismo Literario, ya que es en la universalidad y
singularidad de cada uno donde radica el arte].
_
(Autor: Brichs Papiol, Ángel; El Neomodernismo literario (1ª edición),
que promovía una visión externa de hacer arte, en la
que el medio ambiente y la naturaleza en general eran
sus verdaderos protagonistas. El Neomodernismo
Literario ejerce presión en la coexistencia del pensamiento
y el arte al igual que Gerry Schum y sus coetáneos
de esa tendencia llamada “Land Art”, que creían
que el arte estaba en todas las cosas y era el ser humano
bajo su capacitación, quien le da forma en su esencialismo
natural.
Es en la divergencia, en la controversia, en las diferentes
formas de pensar, en la capacitación sentimental y personal
de cada individuo; en la crítica de cada uno y de todos
nosotros por todo lo que decimos, hacemos y escribimos
donde está la riqueza intelectual de lo que somos y seremos.
Es esa forma de ser subjetivo, la disparidad de ideas,
el individualismo racional de cada individuo que lo hace
diferente del de al lado o el de delante; en ese formalismo
y estética argumental donde radica la gnosis interna que
representa el cauce vital del pensamiento del
Neomodernismo Literario, ya que es en la universalidad y
singularidad de cada uno donde radica el arte].
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(Autor: Brichs Papiol, Ángel; El Neomodernismo literario (1ª edición),
ISBN nº 978-84-92519-34-7, Editorial Cultiva (2008); fragmento (págs. 85-86) ).
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Copyright:
Introducción:
LITERATURA DEL MAÑANA©
Imágenes y fragmento de obra literaria:
Autor: Ángel Brichs©
2.JPG)
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